El piso pélvico es un conjunto de músculos y tejidos que sostienen órganos clave como la vejiga, el útero y el recto. Aunque es fundamental para funciones como la continencia urinaria, la estabilidad del core y la vida sexual, sigue siendo un gran desconocido para muchas mujeres.

¿Por qué es tan importante?

1. Previene la incontinencia 
   Muchas mujeres creen que perder unas gotas de orina al estornudar o reír es normal, pero no lo es. Un piso pélvico fuerte y funcional ayuda a prevenir y revertir la incontinencia urinaria.
2. Facilita el embarazo y el postparto 
   Durante el embarazo, el piso pélvico sostiene el peso del bebé y en el parto juega un papel clave. Fortalecerlo antes y después del nacimiento mejora la recuperación y previene problemas como el prolapso.
3. Potencia tu vida sexual 
   Un piso pélvico tonificado mejora la sensibilidad y el placer, además de prevenir molestias durante las relaciones.
4. Reduce dolores lumbares y mejora la postura 
   Al estar conectado con el core, un piso pélvico equilibrado ayuda a evitar sobrecargas en la espalda y mejora la estabilidad corporal.

¿Cómo saber si tu piso pélvico necesita atención?

Si experimentas escapes de orina, sensación de pesadez en la zona baja, dolor en las relaciones sexuales o dificultad para activar el abdomen, es hora de prestar atención a tu piso pélvico.

¡Empieza a fortalecerlo hoy!

Pequeños cambios como adoptar una buena postura, evitar empujar al ir al baño y realizar ejercicios específicos pueden marcar la diferencia. Consultar con una kinesióloga especializada en piso pélvico es el primer paso para una salud pélvica óptima.

Recuerda: Conocer tu piso pélvico es el primer paso para cuidarlo. ¡Haz que forme parte de tu bienestar diario!